En el proyecto BIO-CONDUCTIVE-INKS, financiado por el IVACE a través de los fondos FEDER, se ha trabajado además en la formulación de tintas conductivas para impresión. El Instituto Tecnológico del Embalaje, Transporte y Logística (ITENE) ha logrado la formulación de tintas para aplicaciones de envase y embalaje más respetuosas con el medio ambiente y más asequibles en términos económicos para algunos sectores que no pueden asumir este sobrecoste.

En concreto, en el marco del proyecto BIO-CONDUCTIVE-INKS, financiado por el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE) a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), se han obtenido tintas biobasadas imprimibles por flexografía y con propiedades barrera a grasas para sustratos de papel y cartón.

Asimismo, se ha desarrollado un segundo tipo de tintas biobasadas imprimibles por distintos métodos para la decoración de los envases y embalajes, todo ello aplicable a distintos sectores de bienes de consumo.

Por otra parte, se ha trabajado en la formulación de tintas conductivas para su impresión, también por diversos métodos, en materiales de envase flexible mediante la electrónica impresa. La electrónica impresa consiste en la aplicación de tecnologías de impresión en el mundo de la electrónica y permite el desarrollo de componentes electrónicos flexibles como biosensores, antenas, tarjetas inteligentes, células solares fotovoltaicas o etiquetas RFID.

A través de la impresión de estas tintas conductivas en envases se podrán desarrollar multitud de componentes electrónicos, tales como sensores que garanticen la calidad y la seguridad de los alimentos que consumimos o que incluso ayuden a la selección de alimentos en el momento de su compra a partir de las necesidades y patologías del consumidor final.